AM5-BCS-1-16

Técnicas artesanales (artes y oficios tradicionales)

Local

El Triunfo, municipio de La Paz, B.C.S.

Considerada una manifestación del Patrimonio Cultural Inmaterial (PCI) de Baja California Sur, la cestería se elabora al Sur del estado, principalmente en la localidades de El Triunfo, San Moisés y San Fermín, ubicadas a 45 kms. de La Paz. En el antiguo pueblo minero de El Triunfo, se explotaba la minería desde 1748, gracias a Manuel de Ocio, un ex soldado misional, quien fundó el Real de Santa Ana. La minería estuvo vigente, con altibajos hasta las primeras décadas del siglo XX. Esta actividad no sólo provocó el florecimiento de el comercio sino también fue notable el crecimiento de ranchos aledaños los cuales eran proveedores de productos básicos. La prosperidad de estos pueblos se vino abajo cuando la compañía minera “El Progreso” paró sus labores, al dejar de ser costeable. Ante la falta de trabajo los pobladores migraron en busca de trabajo y los que se quedaron tuvieron que alternativas de trabajo. Así nació la pasión por el trabajo de palma, técnica que con el tiempo se ha ido perfeccionando, hasta ser un referente artesanal de la localidad.

Además de ser una fuente de ingresos, el tejido de palma ha llegado ser tan notoria que en los concursos artesnales, los artesanos han obtenido primeros lugares tanto a nivel estatal como nacional. El tejido de palma se realiza con el llamado "cogollo", con él se confeccionan canastas, tortilleros, rejoles, lámparas y adornos caseros de diversa índole. El trabajo se realiza de manera manual, sólo con el apoyo de herramientas simples como tijeras o navaja, muchas veces elaborado por ellos mismos. El oficio se ha transmitido de generación en generación.

La producción artesanal ha subsistido por varias razones: crea objetos de uso que desempeñan un papel simbólico en las costumbres de un pueblo; generalmente los artesanos producen a más bajo costo algunos artículos; las artesanías de El Triunfo son consumidas por los visitantes (nacionales y extranjeros). Sin embargo, esta práctica se encuentra en riesgo debido a la falta de materia prima.

Se requiere el uso sustentable de la palma y fomentar la siembra y cosecha de palmeras para evitar la extinción de la materia prima, así como de apoyos a los artesanos y la difusión de la importancia de estas piezas.