El inmueble de estilo neoclásico que alberga a este museo data de finales del siglo XVIII. Su edificación, atribuida al arquitecto valenciano Manuel Tolsá, correspondió al antiguo palacio del conde de Buenavista, habitado posteriormente por el general Antonio López de Santa Anna y la familia de Iturbe. Durante el siglo XX tuvo varios usos, entre ellos fábrica de cigarros, oficinas de la Lotería Nacional y sede de la Preparatoria Nacional núm. 4 de la UNAM, hasta que en 1966 fue cedido al INBA e inaugurado como Museo de San Carlos en 1968, y como Museo Nacional en 1994 por decreto presidencial. Su acervo proviene de las galerías de arte de la Antigua Academia de San Carlos, fundada por Carlos III en la Nueva España; está integrado por obras de artistas europeos que donaran la Academia de San Fernando de Madrid y la Academia Mexicana de Pintura, así como por coleccionistas privados. En él se pueden apreciar obras de Rubens, Carrucci, Tintoretto, Zurbarán, Goya, Ingres, Clavé y Sorolla, entre otros grandes maestros de la pintura europea.

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El Museo de San Carlos es poseedor de una de las más importantes colecciones de arte occidental de los siglos XVI al XX en América Latina. Su acervo, que principalmente proviene de las galerías de la Antigua Academia de San Carlos, se fue enriqueciendo por medio de adquisiciones, encargos directos a pintores españoles, donaciones, así como con parte de las pinturas expropiadas a los conventos suprimidos en el siglo XIX.
También guarda algunas copias que de obras de los grandes maestros ejecutaran los alumnos de dicha escuela. La Academia de San Carlos fue fundada por orden de Carlos III en 1783 como Real Academia de las Tres Nobles Artes. En 1843, el presidente de la República, general Antonio López de Santa Anna, propicia el resurgimiento de esa institución y de sus galerías, que habían estado en desuso algunas décadas. Durante la administración del presidente Gustavo Díaz Ordaz, buena parte de lo expuesto en las galerías de la Academia, sobre todo las escuelas europeas, se incorpora al recién creado Museo de San Carlos.
El bello edificio neoclásico que lo alberga, el llamado Palacio del Conde de Buenavista, fue construido por el arquitecto valenciano Manuel Tolsá. Sin apartarse totalmente del sentimiento barroco en el que fue formado, Manuel Tolsá logra una solución plástica sobria, que contrasta con la singularidad de su monumental patio oval.
El Museo de San Carlos, de gran tradición en México, cuenta con un programa de servicios educativos, entre los que destaca la atención dedicada a niños y jóvenes. Muy pronto, en un edificio anexo, establecerá una biblioteca de arte de servicio gratuito. (Fuente: La guía. Artes de México).

12 de junio de 1968