Formó parte del Taller de Teatro de la Universidad Autónoma de Baja California (1987-1990). Participó en Matar a la frívola, Nosferatu Gómez, Marca en el agua, todas dirigidas por Ignacio Flores de la Lama. Estudió en la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana en 1990. En 1991 se integró a la Compañía de Teatro Independiente Tablas y Diablas, que dirige la maestra Alicia Martínez. Participó como actriz en los montajes ¿De qué te ríes?, El cerco de Numancia, Las aventuras de Arlequín y Pantaleón, bajo la dirección de Alicia Martínez. Como actriz, se ha presentado en las ciudades de México, Xalapa, Cuernavaca y Dallas, Texas. En 1993 estudia por un periodo de dos años con el maestro Abraham Oceransky y participa en la obra La maravillosa historia del Chiquito Pingüica, bajo la dirección de Oceransky, con presentaciones en todas las escuelas primarias del estado de Veracruz. De 1994 a 1996 se desempeña como maestra y directora de la compañía infantil de teatro Tablas y Diablas. A su regreso a Tijuana, funda el taller permanente de Teatro Infantil del Centro de Artes Escénicas del Noroeste. Colabora como docente en campamentos de verano, cursos y talleres que se llevan a cabo en la ciudad de Tijuana. En esta última ciudad ha participado en actuación en las obras Romeo y Julieta (Shakespeare; dirección de Ignacio Flores de la Lama), El último recurso (autor y dirección de Daniel Serrano), ¡Hombres! (Sergi Belbel; dirección de Ignacio Flores de la Lama), París detrás de la puerta (autor y dirección de Daniel Serrano). En dirección escénica cuenta con las obras Silencio blanco (creación colectiva, 1998), Dominó (Elba Cortés, 1999-2000), Villa, su padre (basada en La madrugada, de Juan Tovar, 2000-2001), El animador (como directora invitada del Taller Universitario de Teatro. Rodolfo Santana, 2002) y El misterio del circo donde nadie oyó nada (Alberto Lomnitz y Carlos Corona, 2002).