En el añejo pueblo de Concordia, en el número 21 de la calle Salomé Vizcarra, existe un excelente ejemplo de arquitectura habitacional, típicamente propia de un asentamiento minero de origen novohispano. Construida durante el último tercio del siglo XVIII, no obstante su sencillez formal, es evidente la influencia del trabajo en cantería realizado en el templo de San Sebastián. Contenida dentro de una distribución espacial sencilla, con cubierta a dos aguas en una tablazón con teja de barro. Simplicidad contrapuesta a la extraordinaria guarnición de cantería que se muestra en su puerta. Decorada con elementos formales que se encuadran en concordancia con el barroco del norte novohispano; de expresiones liberadas de aquellas pautas que rigieron las diversas modalidades barrocas novohispanas. Aquí se recurrió a los mismos ornamentos fitomorfos utilizados en el templo parroquial, se ven algunas formas geometrizantes, mezcladas con lacerías y flores que simulan girasoles, similares a las expresiones que tanto abundan en la portada del templo.

Patrimonio arquitectónico