Exhibe diferentes tipos de antigüedades. La colección está distribuida en las habitaciones de la casa de sus dueños. La recámara está decorada con detalles de objetos de todo tipo. En la cocina se observan trastes y vasijas, en especial las vajillas y piezas sueltas de cerámica vidriada. Muestra diferentes huesos, molares y colmillos de mamut y probablemente de otros ejemplares de la fauna de gigantes del Pleistoceno. Aquí se encuentran piezas y documentos de los tiempos de la Revolución, así como dos colecciones de puntas de flecha, dardos y varios instrumentos de piedra. Destacan los murales de la autoría de doña Elizabeth Dávila. En el patio se observan las colecciones de trastos de peltre, de lecheras decoradas con flores, los implementos agrícolas de hierro de principios del siglo XX y la colección más grande de morteros, metates y molcajetes prehispánicos de toda la región.

6 de diciembre de 2008